¡Buenas noches, familia!

Hoy la temática del blog me viene como anillo al dedo, y nunca mejor dicho. Estamos de evento de nuevo, y ya hemos empezado con los “¡vivan los novios!” en público. El evento donde estamos trabajando se ha venido arriba y, por supuesto, no ha faltado el recordatorio del anfitrión de que quedan solo 14 días para la boda… ¡y que todavía hay muchas cosas por hacer! Jajaja.

Nos preguntan mil veces si estamos nerviosos. Sinceramente, si me paro a pensarlo, pues sí, un poco, pero es que no tenemos tiempo ni para eso. ¡Estamos a tope! Jajaja.

De hecho, mirad cómo estoy ahora: escribiendo este blog mientras Sergio está pinchando. El fotomatón ya terminó, pero yo sigo aquí, intentando que no se me haga tarde para escribir la entrada de hoy y echarle un ojo a las fotos de una clienta para poder descansar cuando lleguemos a casa. ¡Multitasking nivel boda!

Los nervios y el trabajo

Creo que la mejor respuesta a la pregunta de si estamos nerviosos la da Sergio: “el trabajo llama al trabajo”. Básicamente, los nervios se quitan haciendo cosas. Y no le falta razón.

Inciso: Ahora mismo está sonando «Danza Kuduro» a todo volumen… ¡jajaja! Así no se puede pensar…

La verdad es que ya no hay tantos nervios como al principio. Lo que sí pensamos constantemente es en lo poco que vamos a dormir hasta que pase la boda, porque hay un montón de cosas que preparar. Pero nervios como tal… diría que ya no quedan tantos.

Lo que me ayuda a estar más tranquila es hacer listas. Para mí, funciona tener una libreta donde apunto todo lo que hay que hacer y luego voy tachando las tareas según las completo. Me sirve para organizarme y despejar la mente. Sergio, por otro lado, vive al límite… él solo apunta lo imprescindible, jajaja.

El apoyo de todos

Algo que nos está dejando muy tranquilos es saber que, mientras nosotros trabajamos este finde, vosotros vais rellenando los formularios, y esos datos se guardan en la base de datos. Esto significa que mañana, con un ratito que saquemos, podremos sentarnos a terminar de confirmar todos los invitados. Por no hablar de que los que ya han rellenado pero se «caen», me escriben y es como que tengo posits en la cabeza, para recordar que esas personas ya no vienen, hasta que miremos el Excel.

Tenemos que hacerlo ya porque, entre otras cosas, esta semana toca hacer los pedidos florales para que lleguen a tiempo. Además, hay otras cosas que no están bajo nuestro control, como el hecho de que los regalos de los invitados aún no han llegado. ¡A saber dónde andan! Pero bueno, estamos cruzando los dedos para que todo salga bien.

Y sobre todo, lo que más me relaja es pensar en todas las personas que están implicadas para que esta boda salga adelante. Me acuesto cada noche pensando en lo agradecida que estoy con todas esas personas que están poniendo su granito de arena. Nos lo están haciendo todo mucho más fácil. ¡De corazón, mil gracias a todos!

Y ahora… a bailar!

Os dejo porque mi batería está a punto de agotarse y entre eso y que ahora está sonando «Me sube la bilirrubina» no puedo concentrarme… ¡Ah! Y ahora Shakira. Jajaja. ¡Me voy!

Buenas noches, familia y amigos.
Un abrazo bailongo de parte de Sergio y Lucía. 😊💃