¡Buenos días, familia!

Cada vez que nos ve, Julio nos pregunta cuántos invitados tenemos confirmados ya y si han caído muchos. Lo cierto es que, si esto fuera una gráfica, serían ondas perfectas: se caen dos y confirman dos nuevas personas, jajaja. Aunque dicen que al final siempre caen más en la última semana, de momento tenemos 198 personas confirmadas (100% seguras, unas 190). Así que, ¡seguimos a buen ritmo!

Nuestro domingo de «descanso»

Hoy, después de todo el finde trabajando, hemos decidido no salir de casa y dedicar el día a organizar cómo vais a ir sentados. Sinceramente, creo que lo más probable es que os lo compartamos todo por aquí para que podáis saber más o menos en qué zona os sentaréis. Por ahora, os enseño unos pantallazos del trabajazo que ha hecho Sergio dibujando los planos del restaurante y distribuyendo las mesas. Aprovecho para explicaros un poco cómo lo hemos hecho.

Primer plano de los salones

Para quienes no conozcáis el espacio, el restaurante tiene cuatro salones: tres grandes y uno más pequeño (el gris) que es el de diario, donde la gente suele ir a comer o cenar sin necesidad de asistir a un evento. Normalmente, cuando hay varios eventos, se cierran o abren salones según el número de personas. Pero, como nosotros somos «ciento y la madre», usaremos dos salones para la comida, y el tercero será para la fiesta (¡en ese solo habrá música, así que no hay mucho que organizar ahí, jajaja!).

En un principio, empezamos con 21 mesas, luego las redujimos a 20, y finalmente nos hemos quedado con 19 mesas. Moverlas y reconfigurarlas ha sido casi un juego de Tetris: “¿Y si juntamos a estos con aquellos?”, “¿Por qué no ponemos a estos aquí y a estos allá?”, “Mejor aquí, porque…”. Después de mil vueltas, os enseñamos los resultados finales después de pasar todo el domingo reorganizando, jajaja.

Julio nos pidió al principio que evitáramos demasiadas mesas de 12 personas porque estarían muy apretadas, así que hicimos y deshicimos varias veces. Por ejemplo:

• Los niños pequeños estarán sentados con sus padres (excepto los «primos mayores» que ya pueden comer solos).
  • A mí me da mucha pena ver a padres levantándose constantemente para dar de comer a sus hijos en otra mesa, así que hemos pensado que es mejor que coman juntos. Así los padres no tienen que estar de pie todo el tiempo y, cuando los peques terminen de comer, se pueden ir a jugar sin problema.
  • Además, muchos niños no se conocen entre ellos, así que creemos que es más cómodo que estén con sus padres al principio. Ya habrá tiempo para que hagan amigos.

Por otro lado, la mesa 1 es la nuestra, con solo dos sillas. Sí, nos sentamos solos. Creemos que es lo más cómodo porque probablemente no estemos mucho rato sentados (¡comeremos como pollos!), y así no dejamos a nadie solo en la mesa. Además, la hemos colocado lo más céntrica posible para estar cerca de todo el mundo.

Segundo plano de los salones

Gracias a los formularios que nos habéis enviado, ya sabemos cuántos solomillos, bacalaos y menús infantiles van a cada mesa. Esto va a facilitar muchísimo el servicio, porque nadie tendrá que estar preguntando qué quiere comer. ¡Mirad qué control interno lleva Sergio con sus gráficos y tablas!

Por cierto, pensábamos que esta boda no iba a ser de «cierra bares», pero viendo los formularios, nos habéis sorprendido, ¡jajaja!

Un día productivo, pero…

Aunque el día ha sido súper productivo, también teníamos pendiente una reunión con el fotógrafo y el videógrafo de la boda. Al final no la tuvimos, pero no pasa nada. Los planos de las mesas eran una prioridad, porque ahora, con la distribución cerrada, podemos empezar a pedir los centros de mesa y ajustar la cantidad de flores necesarias. Sergio siempre dice que hasta que no se acerca el lunes de la semana de la boda hay cosas que no se pueden empezar, y en esto tiene toda la razón (aunque me cueste admitirlo, jeje).

Para terminar…

Vaya entrada más completa la de hoy, ¿eh? Tengo que reconocer que, con toda la infraestructura informática que ha montado Sergio, así da gusto organizar bodas, jajaja. Pero bueno, os dejo ya. A ver qué os cuento mañana, todo dependerá de lo que avancemos.

Buenas noches y que tengáis un buen comienzo de semana.

Un abrazo,
Lucía y Sergio 😊